EL JUEGO DE BOLAS
EN "LA TILAPIA"
CORO:
No es un juego para mochos,
pero a ninguno incomoda;
es un deporte de moda
y le gusta hasta los chochos;
Keidys que monte el sancocho,
Yonart no la dejes sola;
Haydeé pela los topochos
y los echa en la perola;
Luis comiéndose un bizcocho,
Milca agarrando las bolas.
En "La Tilapia" es la cosa,
donde se da este jueguito;
mis coleguitas lo gozan
y tiran su bochecito.
Es un juego popular,
sobre todo los domingos;
y, su objeto es arrimar,
las bolitas para el mingo.
Se prepara un sancochito,
música de vieja ola,
alguien sirve los traguitos
y empieza el juego de bolas.
Los colores de las bolas,
necesario es escoger;
si a ti te tocan las rojas,
las verdes pa`mí han de ser.
A un juez se debe nombrar,
para que se hagan consultas;
es quien va a garantizar,
que no se formen trifulcas.
Al momento de tirar,
concentrarse es necesario;
sin detenerse a escuchar,
los gritos del adversario.
Antes de lanzar tu bola,
un pie tienes que calzar;
y agachar bien esa cola,
si es que quieres arrimar.
Al que no tiene destreza,
le dicen que es un venao;
si el reumatismo te empieza,
mejor coge pa`otro lao.
Al que se bocha a sí mismo,
le dicen que está espicao;
y, al que arrima pata`e mingo,
se le da un boche clavao.
Si gritan que venga Euclides
el tipo corre afanoso
porque es el hombre que mide,
cuando el juicio está dudoso.
Pereira fue por un rato
a la cocina, ¡ay, Dios mío!;
allí se metió tres platos
y él jura que "mar comío".
De lo más jacarandoso,
Isidro en el dominó;
Y Moisés está furioso,
¡la cochina se la ahorcó!
Y Emile le dijo entonces,
deje la furia, mi amigo;
para que no se la ahorquen,
ahorita juegue conmigo.
Néstor vino con demora,
pagándose su pasaje:
-Estoy llegando a esta hora,
¡mandando estaba mensajes!
Y Junior con sus corotos,
en una cola llegó;
porque al salir, a la moto
un caucho se le espichó.
Dumila le dijo a Zulma,
ni dominó, ni rockola,
baraja es juego de chusma:
¡a mí me gustan las bolas!
Y Nolberto que la oía,
dijo no eres la primera;
así una amiga decía
y hoy está en la dulce espera.
Desde Colombia Yannellis
llamó para saludar;
yo quisiera con ustedes,
mi bochecito tirar.
Patricia alegre reía,
Glenys y Eva bailaban
Miriam y Nerba comían
y Russys las observaba.
María Gabriela cantaba,
los discos de Juan Gabriel;
y Reinaldo le gritaba,
¡yo canto mejor que él!
Cova llegó con el hielo
y Yesenia le gritó:
¡profe, póngalo en el suelo,
ya María Ubac le sirvió!
¿No trajeron una cava?,
el profesor respondió;
-¡Claro que sí, camarada,
eso lo acomodo yo!
Yosalis gozaba un mundo,
Richard serio y circunspecto;
Luis Brito interroga a Edmundo,
¿aclárame, eso es correcto?
Cosme Arzolay se dio vida
con las croquetas de mero,
que llevaron Maigualida
y Jota, su compañero.
Y Gioconda le sugiere
a su timbo enamorado:
Cosme, ponte a caminar,
pa`que bajes el pescado,
si es que quieres disfrutar
la sopa de hueso`e rabo.
Desde la cancha de bolas,
María Seijas nos gritó:
¡sirvan ron con coca cola,
porque Cesárea ganó!
Como capitana quiero,
un favor para estas madres,
se los pido, se los ruego:
¡que haya de bolas un juego,
siempre el Día de los Padres!
Jesús Núñez León.